Alimentos para bebés: cuándo y cómo empezar la alimentación complementaria

¿Tu bebé está a punto de cumplir seis meses y te preguntas cuándo y cómo iniciar la alimentación complementaria? Tranquilos, estáis en el momento justo para descubrir una nueva etapa llena de sabores, texturas y mucho aprendizaje para ambos.

En Maternify te compartimos esta guía completa que te ayudará a entender qué es, cuándo iniciarla, qué alimentos ofrecer y cómo hacerlo de forma segura.

¿Qué es la alimentación complementaria?

La alimentación complementaria (AC) es el proceso en el que el bebé comienza a recibir alimentos distintos a la leche materna o fórmula, como complemento, no sustituto.

La lactancia sigue siendo prioritaria, y debe mantenerse a demanda durante todo el proceso, idealmente hasta los 2 años o más, siempre que madre e hijo así lo deseen.

¿Cuándo empezar la alimentación complementaria?

La recomendación general es iniciar la alimentación complementaria a partir de los seis meses de edad. Antes de eso, la leche materna o fórmula cubre todas sus necesidades nutricionales.

¿Por qué esperar? Porque es alrededor de los 6 meses cuando el bebé ya tiene la maduración neurológica, renal, gastrointestinal e inmune suficiente para digerir y procesar otros alimentos de forma segura. Además, suele alcanzar ciertos hitos del desarrollo que lo hacen estar preparado.

¿Cómo saber si mi bebé está listo?

Además de la edad, asegúrate de que tu bebé cumple con los siguientes requisitos:

• Se mantiene sentado con apoyo.
• Ha perdido el reflejo de extrusión (ya no expulsa con la lengua los sólidos).
• Muestra interés por la comida.
• Es capaz de llevar alimentos a la boca con la mano.

¿Qué pasa si empiezo demasiado pronto o demasiado tarde?

• Antes de los 4 meses: Riesgo de atragantamiento, menor aporte nutricional y mayor riesgo de obesidad o destete precoz.
• Después de los 6-7 meses: Posibilidad de carencias de hierro, mayor riesgo de alergias alimentarias y peor tolerancia a texturas y sabores.

¿Con qué alimentos empezar?

No existe un orden rígido, pero se recomienda introducir alimentos de uno en uno, con 2-3 días de margen para observar tolerancias o reacciones alérgicas.

Alimentos recomendados para comenzar:

• Cereales sin gluten: arroz, maíz.
• Frutas: plátano, pera, manzana, etc. Todas aptas desde los 6 meses.
• Verduras: zanahoria, calabacín, patata, calabaza.
• Legumbres.
• Carne (ternera, pollo).
• Huevo cocido completo (sin separar yema de clara).
• Pescado blanco (merluza, lenguado).
• Aceite de oliva.

Evita añadir sal, azúcar o edulcorantes.

¿Qué alimentos deben esperar?

• Verduras de hoja verde (acelgas, espinacas): después de los 12 meses por nitratos.
• Pescados azules grandes (atún, pez espada, emperador): mejor evitarlos hasta los 10 años por mercurio.
• Leche de vaca entera: a partir de los 12 meses. No son necesarias las “leches de crecimiento”.
• Frutos secos enteros: a partir de los 4-5 años por atragantamiento. Se pueden ofrecer desde los 6 meses en forma de crema o polvo.
• Miel: nunca antes de los 12 meses por riesgo de botulismo.
• Zumos y alimentos ultraprocesados: cuanto más tarde y en menor cantidad, mejor. No son recomendables.

¿Cómo introducir el gluten?

Introduce el gluten entre los 4 y 11 meses, idealmente cerca del sexto mes, en pequeñas cantidades. No es necesario usar cereales infantiles: el pan, pasta o harinas integrales son opciones válidas y naturales.

Evita los cereales en polvo con azúcares o miel añadida, ya que pueden favorecer la aparición de caries y no ofrecen beneficios reales.

¿Cuánto debe comer?

Las porciones deben ser pequeñas al principio, aumentando progresivamente según su apetito. Cada bebé es diferente, así que respeta sus señales de hambre y saciedad. No lo obligues a comer.

Comienza con texturas grumosas y semisólidas antes de los 8-9 meses. El rechazo inicial es común: sigue ofreciendo sin presionar.

¿Qué es el Baby-Led Weaning (BLW)?

Es un enfoque en el que el bebé se alimenta solo desde el principio, tomando los alimentos con sus manos. Los padres ofrecen alimentos seguros, variados y saludables, y el bebé decide qué y cuánto comer.

Requisitos para practicar BLW de forma segura:

• El bebé debe cumplir los signos de preparación.
• Sentarse con la familia a la mesa.
• Alimentos blandos, en trozos grandes al principio.
• Siempre bajo supervisión directa.

No se recomienda en bebés con dificultades de crecimiento, neurológicas o motoras, ni en aquellos prematuros sin maduración adecuada (aunque en muchos casos se puede adaptar individualmente).

¿Y si mi bebé es prematuro?

La edad recomendada para iniciar la alimentación complementaria en prematuros es la edad corregida de 6 meses, siempre y cuando muestren las señales de preparación. La forma de introducir los alimentos será la misma que para bebés nacidos a término.

Conclusión

Iniciar la alimentación complementaria es mucho más que introducir alimentos: es fomentar hábitos saludables desde el principio, promover la autonomía, y reforzar el vínculo familiar a través de las comidas.

Disfruta del proceso con paciencia, confianza y respeto por el ritmo de tu bebé. Cada cucharada, trocito o bocado es un gran paso en su desarrollo.