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Respuesta rápida: el calostro es la leche de los primeros días. Sale en poca cantidad porque el estómago del recién nacido es pequeño y porque el cuerpo está ajustando la producción. No es “poca leche”: es leche concentrada, hecha para ese inicio.
El calostro es la primera leche que producimos alrededor del parto y durante los primeros días. Suele ser más denso y puede verse amarillo, anaranjado, blanquecino o transparente.
Está pensado para:
“Poco volumen” no significa “poca calidad”. En calostro, lo normal es poco y frecuente.
Realidad: en los primeros días es habitual que parezcan “solo gotas”. Y aun así puede ser suficiente para ese momento. Lo importante es la frecuencia, el agarre y la evolución del bebé.
Realidad: la demanda frecuente es normal al inicio. El bebé está ajustando la toma y, además, esa frecuencia ayuda a activar la producción. En los primeros días, muchas tomas pueden ser cortas y repetidas.
Realidad: el color no indica que sea “malo”. El calostro puede ser amarillo por su concentración y por componentes propios de esta etapa.
Realidad: no todas vemos calostro al extraer con la mano, sobre todo al principio. Puede haber calostro aunque no se vea fácilmente. La prioridad es valorar cómo se agarra el bebé y si hay señales de toma efectiva.
Realidad: muchas veces no hace falta suplementar solo porque “parece poco”. La suplementación se decide por criterios clínicos (estado del bebé, hidratación, peso, etc.), no solo por la sensación de volumen.
Realidad: en el inicio, el bebé puede cansarse rápido. A veces se queda dormido aunque haya tomado algo; otras veces necesita apoyo para mantenerse activo. Si hay dudas, se revisa agarre y eficacia de succión.
Realidad: también aporta protección y ayuda a iniciar el funcionamiento digestivo. Por eso se le llama a veces “oro líquido”.
Realidad: no está perdido. Puede requerir más estrategia: piel con piel cuando sea posible, tomas frecuentes, y si hace falta, extracción y plan de ofrecimiento. Con acompañamiento, el arranque puede reconducirse.

Más que mirar el pecho, miramos el conjunto:
Si os sentís en duda constante, suele ser señal de que merece la pena una valoración: no para juzgar, sino para quitar incertidumbre.

Recomendamos consultar si:
En Maternify os ayudamos a empezar con claridad y sin culpa:

Es la primera leche de los primeros días tras el parto, más concentrada y con componentes de protección.
Sí. En los primeros días suele salir poca cantidad y el bebé mama con frecuencia.
Puede ser amarillo, anaranjado, blanquecino o incluso transparente. El color varía.
Suele ocurrir tras los primeros días, cuando aumenta el volumen y cambia la composición hacia leche de transición y madura.
Cuando hay indicación clínica (según valoración del bebé). Si hay dudas, se revisa agarre, transferencia y evolución.

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